Se espera que este año el gasto público sin financiamiento sea equivalente al 3.8 % de la producción interna.
Cierre del año. La deuda pública sin pensiones cerrará en 45.9 % este año, como proporción del PIB. Si se agregan pensiones, llegaría cerca del 60 %.
El Ministerio de Hacienda (MH) captó este mes $356 millones en bonos de deuda, de manera que ya terminó de colocar los $1,156 millones en bonos que le había autorizado la Asamblea Legislativa a inicios de 2014.
Carlos Cáceres, titular del MH, explicó que los $356 millones se terminarán de pagar en 15 años y con una tasa de rendimiento para el inversionista de 4.5 %. “Se consiguen buenas tasas y plazos largos, que es lo que se busca cuando se administra la deuda de un país”, comentó el funcionario.
La colocación se hizo durante la primera semana de diciembre y se dividió en tres tramos, es decir, en tres paquetes diferentes para los interesados en adquirir el bono salvadoreño. Sin embargo, al cierre de esta nota no fue posible acceder al detalle de toda la operación.
Estos $356 millones se ocuparon para honrar el compromiso que quedó por el Fideicomiso para Educación y Seguridad (FOSEDU). Este año venció el plazo para pagar a las entidades que invirtieron en el referido fideicomiso.
Los investigadores de la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (FUSADES) criticaron que el Gobierno haya incrementado el saldo de la deuda pública para pagar el FOSEDU y mencionaron que el Gobierno ya tenía conocimiento de esta obligación financiera, por lo que se pudo haber pagado con el presupuesto nacional.
Los otros $800 millones en bonos aprobados por el congreso se utilizaron para pagar por adelantado las Letras del Tesoro (LETES), deuda de corto plazo. La colocación se celebró en septiembre y bajó el saldo de las LETES. Después, entre octubre y noviembre, el MH acudió de nuevo a la deuda de corto plazo y el saldo ha quedado en $281.8 millones.
Luis Membreño, analista y empresario, ha explicado antes que Hacienda tiene dificultades para dejar las LETES a cero, debido a los vencimientos de colocaciones anteriores de esta deuda.
Finalmente, Cáceres indicó que este año el desfinanciamiento de las finanzas públicas, o déficit fiscal, cerrará en 3.8 % como proporción del Producto Interno Bruto (PIB). Inicialmente se esperaba más del 4 % del PIB. Cáceres detalló que uno de los motivos para esta variación es que el fisco ha recolectado $250 millones menos de lo programado en el presupuesto nacional 2014 (entre impuestos y contribuciones). “Cuando hay una baja recaudación, lo que hacemos es bajar también los gastos y justamente por eso ha bajado el déficit fiscal”, aseguró Cáceres.
